LAS MOIRAS, LAS HADAS Y LA DICHA

mayo 2nd, 2012

Me gustan las palabras, mucho. Me gusta saber cómo llegaron a significar lo que significan. Me gustan los juegos que permiten y los dobles significados.

Por eso cuando hoy leí  sobre la palabra «dicha» lo quise compartir.

Curiosamente, para hablar de la «dicha» hay que hablar de las Moiras (o de las Parcas de los romanos o las Nornas de los nórdicos)

Aquellas tres hijas de Zeus y Temis, según algunos, o hijas de la Noche, según otros, son las responsables de regir el destino de las personas.

El destino, representado por un hilo que la primera, Cloto – la hilandera, la más joven- hila desde su rueca hasta su huso, para que más tarde la segunda, Láquesis -«la que echa a suertes»- lo mida con su vara hasta que la tercera, Átropos, -la inexorable, la más vieja- corta cuando llega al término de la vida que aquel hilo representa; ella escogía la forma en la que moría cada persona, y cuando su tiempo llegaba cortaba su hebra con sus afiladas tijeras.

A ellas no se les puede rogar ni pedir, pues viven en una caverna en el centro del cosmos y de la noche, y no escuchan las plegarias humanas. Simplemente actúan y hacen lo que deben hacer.

Pero resulta que las Moiras también están identificadas con las hadas.

 

Y quién no recuerda el poder de la palabra de aquellas hadas cuando nació la Bella Durmiente, derramando sobre ella los máximos dones que una princesa debería tener («serás la más bella, serás la más talentosa, serás la más…»)

Así llegamos a la relación entre el verbo decir y la felicidad: nos cuenta el artículo que los romanos creían que la felicidad dependía de las palabras que los dioses (o las parcas o las hadas…) pronunciaban en el momento del nacimiento de una criatura, de modo tal que su destino quedaba trazado en… «la cosa dicha».

(Buscando información sobre este tema, me vinieron muchas ganas de hablar de La Bella Durmiente… pero eso queda para otro día.)

Fuentes: Tejiendo el mundo 
Diccionario de mitología griega y romana, Pierre Grimal.

6 Responses to “LAS MOIRAS, LAS HADAS Y LA DICHA”

  1. isabel barceló

    Querida amiga, la palabra dicha por los dioses, se cumplía. Era una palabra especial, no una común. El valor de las palabras era, entonces, muy grande. Ahora, en cambio, ya no se les otorga demasiada importancia, ni como algo que al ser dicho se cumple, ni como algo capaz de sanarnos. Todo se ha vuelto del revés, como tu cajón cuando revolvemos desordenadamente o sacamos todo su contenido afuera.
    Por otra parte, tampoco nos hace falta ser muy listos para comprender que sí, que el cajón donde todos estábamos con cierto nivel de armonía y justicia social, lo han volcado… Un abrazo muy fuerte.

  2. elisabet

    Amiga, hermana, compañera de algún aquelarre: bienvenida la etimología, esa magia de las palabras que nos ilumina, nos ilustra, nos hace comprender los por qué. Ojalá nuestros dioses hayan dicho buenas paabras para nuestro destino. En el mientras tanto… trabajemos por él, para que pueda ser considerado «dichoso». Un beso desde La Plata, Argentina.

  3. Gloria

    Gracias, Elisabet!!!

  4. isabelbarcelo

    Gracias por el enlace que me has dejado. Un abrazo muy fuerte.

  5. alejandra Rutt

    Maravilloso, Gloria! Gracias por esta bella página.

  6. Gloria

    Gracias a vos, Ale!!!

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